Aunque un poco de estrés en periodos cortos de tiempo puede mejorar su rendimiento, los niveles altos de estrés que duran más de un par de días pueden tener un grave impacto en su cuerpo y su mente. Según la Asociación Americana del Corazón, los síntomas del estrés incluyen dolor de cabeza, cuello y espalda, bajos niveles de energía, ansiedad y depresión, falta de memoria e irritabilidad. Y cuando experimentas uno o más de estos síntomas, no pasa mucho tiempo antes de que tu vida personal y profesional empiecen a resentirse.
Afortunadamente, hay varias maneras de manejar el estrés de fin de año. Tenga en cuenta los siguientes consejos:
- Controla cómo te sientes. Cuando sepas que te espera un día ajetreado, reserva un par de minutos de la jornada laboral para hacer balance de cómo te sientes tanto física como mentalmente. Cuanto antes notes síntomas como dolor de cabeza o irritabilidad, antes podrás tomar medidas para aliviarlos.
- Determine cuál es la causa del estrés. ¿Tiene demasiadas cosas que hacer? ¿Hay problemas dentro del equipo que causan fricciones? ¿Tiene problemas con un supervisor o un cliente? ¿O tiene estrés en casa?
Si tienes demasiadas cosas entre manos, prioriza lo que tienes que hacer, delega lo que tu equipo pueda hacer y aplaza las tareas que puedan esperar hasta que estés menos ocupado. Si hay fricciones en el equipo, reserve tiempo para reunirse con sus empleados y resolver el conflicto. Si tienes problemas con un supervisor o un cliente, valora objetivamente qué solución crearía una situación beneficiosa para todos. Si el estrés está en casa, reserve tiempo con sus seres queridos para determinar cuál es la causa y qué puede hacer para reducirlo.
- Practica el autocuidado. Estarás mejor preparado para manejar el estrés si tu mente y tu cuerpo están sanos. Come alimentos sanos, bebe mucha agua, haz ejercicio y duerme lo suficiente.
- Añade pequeños descansos a tu jornada. Aunque pueda sonar contradictorio si estás muy ocupado, hacer un par de pausas breves a lo largo del día puede ayudarte a reducir los niveles de estrés y a revitalizarte. Por ejemplo, además de la pausa para comer, tómate un descanso rápido de 10 a 15 minutos por la mañana y por la tarde. Levántate de la mesa y muévete. Si es posible, dé un paseo al aire libre.
- Utiliza estrategias de emergencia para combatir el estrés. A veces, un correo electrónico o una llamada telefónica pueden disparar tus niveles de estrés. Cuando esto ocurra, tómate un momento antes de responder o actuar. Para ello, cuenta hasta 10 antes de hablar o, si no es suficiente, retrasa tu respuesta hasta que estés más tranquilo.
- Haz algo que te guste cada día. Reserva entre 30 minutos y una hora para una actividad que te guste, como leer, escuchar música, practicar tu deporte favorito o quedar con un amigo. Esto puede ayudarle a relajarse y a aumentar su resistencia al estrés.
Recuerde: el estrés prolongado puede tener consecuencias devastadoras. Pero con estos consejos en mente, tendrá más posibilidades de sortear las situaciones estresantes para mantenerse sano, rendir bien en el trabajo y disfrutar de las fiestas con sus seres queridos.
Fuente: kellyservices.es