Hacer exámenes es estresante, pero puedes hacerlo más fácil mejorando tu forma de estudiar. Estudiar para los exámenes de forma eficaz y eficiente evitará que te sientas desprevenido y te preparará para el éxito.
Sentar las bases para el futuro
1- Revise su programa de estudios. Averigua cuándo serán todos tus exámenes y qué parte de tu nota valen. Anota estas fechas en tu calendario o agenda para que no se te pasen por alto.
Planifica sesiones de repaso al menos una semana antes de cada examen. Lo ideal es que hagas varios mini repasos con bastante antelación, aumentando gradualmente el tiempo de estudio, en lugar de intentar meterlo todo en una mega sesión la noche antes del examen.
2- Presta atención en clase. Parece una obviedad, pero prestar atención en clase te ayudará enormemente cuando llegue la época de los exámenes. No caigas en la trampa de pensar que te limitarás a "absorber" conocimientos; sé un alumno activo. Intenta sentarte en la parte delantera de la clase, así te resultará más fácil concentrarte.
Escuche con atención, porque los profesores suelen dar pistas como "Lo más importante de este tema es...". O simplemente pueden hacer hincapié en determinadas palabras y temas. Esta es la verdadera clave para hacer bien los exámenes. Cuanto más asimiles la información desde el principio, menos tendrás que estudiar.
3- Toma buenas notas. Es más fácil decirlo que hacerlo, pero aprender a tomar buenos apuntes te ayudará enormemente cuando llegue el momento de estudiar. Anota todo lo que tu profesor escriba en la pizarra o ponga en diapositivas. Intenta grabar todo lo que diga el profesor, pero no dejes que tomar notas te distraiga tanto que te olvides de escuchar.
Repasa tus apuntes a diario, justo después de clase. Esto te ayudará a reforzar la información que acabas de aprender.
4- Haz del estudio parte de tus hábitos. Con demasiada frecuencia, es fácil ver el estudio como algo que sólo se hace en el último minuto en una enorme sesión nocturna de estudio. En lugar de eso, intenta reservar un tiempo cada día para estudiar. Programarlo como si fuera otra cita o clase puede ayudarte a mantener la motivación para continuar con el hábito.
5- Pregunte por el formato del examen. Pregunta a tu profesor en qué formato será el examen, cómo se calificará, si hay posibilidades de obtener créditos adicionales y si estaría dispuesto a hablar contigo sobre cómo destacar en tus apuntes, cuáles serán los temas generales más importantes, etc.
Fuente: wikihow.com